Fresas con naranja

Como fresas y naranjas,

tantas, que,

de la noche a la mañana,

brotan entre mi pelo diminutas florecillas blancas.

En el espejo, mi boca ya no es mía,

veo la sonrisa de

la princesa de la boca de fresa.

Mis manos huelen a humus,

a raices serpenteantes.

El aliento dulce del azahar germina en mi nariz,

me saco un pájaro de la manga del vestido,

mi vestido camaleónico,

de fresas y naranjas.

Der erste Blick aus dem Fenster

Abrió la casa,

los postigos y ventanas.

El aire frío entró de la mano de la luz matinal.

Se perdió el olor a cerrado

y el jardín se instaló en las estancias dormidas.

Deambuló de un lado a otro

sin saber muy bien por dónde empezar.

Sus planes se esfumaron en el polvo de los muebles,

se asomó al balcón buscando el paisaje,

la armonía desordenada del espacio abierto.

El vuelo de las cigüeñas del campanario

la devolvió al interior.

Bajó a la cocina, calentó agua,

y plácidamente

esperó el instante ideal,

reconfortante de un té.

Mineral, vegetal, animal

Cuadernos

Algunos Gatos Azules persiguen Mariposas iridiscentes

Lunáticos mimados que sueñan con Ninfas de purpurina

Embrujados teñidos de añil

Felinos celestes sin ratones de lana

Príncipes Azules

Guardianes de las Palabras

Crepúsculo

"... Me gusta el anochecer. No es la noche. Es aún una hora amigable. Nadie tiene miedo de andar solo sin linterna... No sé por qué una clase de oscuridad es tan diferente de otra. La verdadera oscuridad puede ser más densa y silenciosa; llena el espacio que hay entre la chaqueta y el corazón. Se mete en los ojos... Vosotros que camináis tan alegremente, silbando, deteneos cinco minutos. Deteneos en la oscuridad en un campo o un sendero. Entonces os daréis cuenta de que vuestra presencia es solo tolerada. La oscuridad solo os permite dar un paso cada vez. El paso y la oscuridad se cierran contra vuestra espalda. Delante de vosotros no hay espacio ninguno hasta que dais el paso. La oscuridad es absoluta. Caminar por la oscuridad es como nadar bajo el agua, solo que no se puede subir a tomar aire..."

"La pasión" Jeanette Winterson

Compoesía de manzana

Decidió desayunar en el porche,

acompañada de jóvenes plantones de fresas

y el olor intenso del jazmín.

Alrededor del espliego,

los insectos excitados se afanaban incansables.

Pensó, mientras los observaba,

en lo mucho que había cambiado el aspecto de aquel rincón de la casa.

Se acordó del lado deshabitado de si misma.

Preparó una nueva taza de café para estirar la mañana,
probó la compota de manzana sobre el pastelito de hojaldre.

Sintió una caricia en el paladar

que se extendió hasta el laberinto de su ombligo,

donde guardaba las lágrimas.

Femenino singular

Imagínate que el primer día de tu primera menstruación tu madre te hubiera regalado un ramo de flores, te hubiera llevado a comer fuera y después las dos hubierais ido a la joyería, donde os esperaba tu padre, te hubieran hecho agujeros en las orejas y él te hubiera regalado tu primer par de pendientes, y luego hubieras ido con algunas de tus amigas y también con amigas de tu madre a pintarte por primera vez los labios; y después, por primera vez, hubieras asistido a la asamblea de las Mujeres a aprender la sabiduría femenina.

¡Qué diferente habría sido tu vida!

Judith Duerk, Circle of Stones